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Las vinotecas, la mejor opción para conservar tus botellas de vino 

Las vinotecas son armarios frigoríficos especiales para conservar las botellas de vino, ya que permiten controlar aspectos como la temperatura o la humedad. Este tipo de frigoríficos y congeladores no solo sirve para almacenar tus botellas, sino que es la opción perfecta para que no se estropeen. Si te consideras un entusiasta al vino, seguro que deseas que su calidad se mantenga intacta y conserve todas sus propiedades. En función del tipo de vino, podría no ser recomendable que lo dejes a temperatura ambiente o en la nevera, además que muchos precisan de condiciones especiales que solo proporcionan las vinotecas.
¿Cuánto cuesta una vinoteca? Entre 40 y 200€, dependiendo de su capacidad, marca y otros aspectos.

Dos clases de vinotecas
Para que el vino conserve su aroma y su sabor, debe conservarse en óptimas condiciones. Las vinotecas son los electrodomésticos encargados de este cometido, pero cabe mencionar que hay dos tipos.
En primer lugar, están las vinotecas de conservación. Se trata de un aparato indicado para almacenar el vino a la temperatura adecuada, como si de una bodega se tratara. En este caso, las vinotecas cuentan con diversos espacios diferenciados que cuentan con su propio regulador de temperatura. Esta función es especialmente útil en el caso de que desees guardar varias botellas, pero cada una requiere una temperatura de conservación y nivel de humedad diferente.
Por otro lado, las vinotecas de envejecimiento mantienen la misma temperatura en todo el espacio. Están indicadas para almacenar aquellos vinos que tienen las mismas necesidades y permiten que el caldo madure hasta alcanzar una calidad idónea. Por lo general, este tipo de vinotecas son de menor tamaño que las de conservación.

Cómo escoger tu vinoteca
Para los amantes del vino, disponer de una vinoteca puede ser tan útil como lo sería para cualquier hogar contar con un congelador. Eso sí, antes de elegirla, sopesa si la quieres para guardar tus botellas o para que estas vayan tomando cuerpo poco a poco. Dependiendo del modelo y la capacidad, es posible que puedas instalarla en la cocina o en el salón, como si fuera un pequeño frigorífico de una puerta.
Recuerda que lo mejor es almacenar tus botellas tumbadas para que el corcho se mantenga húmedo. Trata de colocarlas con la etiqueta hacia arriba, ya que así podrás identificarlas rápidamente. Es importante que las botellas no rocen la pared del fondo de la vinoteca. No te preocupes por los malos olores, pues están equipadas con filtros de carbón para evitarlos. Asegúrate, por tanto, de que la disposición de las botellas no los bloquea.