Balastos para iluminación de crecimiento para hidroponía

Balastros para hidroponia y cultivo de semillas

Un balastro es un dispositivo empleado para regular la corriente eléctrica en un tubo fluorescente, en una lámpara de haluro metálico o en una de vapor de mercurio. Sus múltiples aplicaciones son apreciadas en diversos campos y en eBay se pueden encontrar en un amplio rango de precios: desde las más económicas, sobre todo de segunda mano con poco uso, a las de precios más elevados.

Se compone de varias partes, el núcleo como parte fundamental, la carcasa o envoltura de protección, y un sellador de poliéster entre ambos componentes que sirve para aislar.

¿Para qué sirven los balastros?

Sus principales funciones son dos:

  • Aportar tensión para que el fluorescente se encienda correctamente.
  • Limitar la corriente cuando este está encendido, en función del uso y la iluminación que se requiera.

Por sus aplicaciones, su utilización es frecuente, por ejemplo, en estos dos campos.

  • Hidroponía: cultivo de plantas en disoluciones de base acuosa, con un soporte de arena, grava u otros.
  • Cultivo de semillas: sobre todo de cannabis, cuya utilidad terapéutica demostrada por la ciencia le está abriendo la puerta en algunos países. De hecho, su consumo es habitual en los clubes sociales de cannabis, legales en España.

¿Cómo funcionan en el cultivo de semillas?

El cultivo de semillas requiere de unas condiciones óptimas de ventilación e iluminación, lo que implica el uso de, entre otras herramientas, lámparas de descarga, tales como bombillas de vapor de sodio o lámparas de haluro metálico.

Se usan bombillas y balastros de la misma potencia, que se montan fuera del espacio de cultivo y a una distancia considerable del suelo, para prevenir disfunciones por humedad. Es habitual colgarlas.

La conexión se suele considerar sencilla, se hace directamente con la bombilla a través de cables, tomas y fuente. Se puede instalar incluso un botón para encender.

¿Qué características deben tener los balastros?

Recogemos las más importantes con ejemplos, ya que varían de un modelo a otro.

  • Tipo: puede ser electromagnético o electrónico. Estos últimos han ido ganando peso por sus ventajas: pesan menos, tienen menor tamaño, no se calientan tanto, son más eficientes en cuanto al consumo eléctrico, más silenciosos y más inocuos para la bombilla. Sin embargo, también son más caros que los electromagnéticos.
  • Materiales: dependiendo del tipo y modelo, pueden ser de cobre con carcasa de aluminio.
  • Potencia: las hay diferentes, pero debe ser igual a la bombilla o lámpara a la que se conecta.